La enseñanza de la numeración de los pueblos originarios de México 3
3.1
Irregularidades
Es
común en los sistemas de las lenguas del mundo el que tengan algunas
irregularidades. A veces éstas
implican que existan dos o más cadenas
fonéticas para expresar un mismo número. El sistema numérico del español tiene varios casos; por ejemplo, diez se expresa como ce
en los números once,
doce, trece, catorce y quince. Además, se
expresa como enta en los números cuarenta, cincuenta sesenta, setenta, ochenta
y noventa. Siete se expresa como sete en setenta y setecientos y cinco como quin
en quince y en quinientos. En el caso del ëyuujk, como ya se señaló, mëkoxk (5) se expresa como tujk
en los números
tëtujk (6), ëxtujk
(7), tuuktujk (8) y taxtujk
(9). También el tu‟uk (1)
se expresa como të que se deriva de la palabra tënepä que significa uno porque se encuentra en algunas expresiones con ese significado, que es la
siembra que se hace cuando
se ha
echado a perder la primera
siembra y literalmente es të = “una” -neba = “ya pasó”.
En ocasiones, las irregularidades
se deben a que los lexemas numéricos se abrevian. Ese es el caso del tëkipx (60), el cual es una abreviación
de la expresión tëkëëjk ep‟x (3X20) También es el caso de mojkx (mekoxk) (5). En el español sucede algo
similar con la palabra ochenta, la cual es
una abreviación de la expresión ochoenta. En ocasiones, los fonemas
que forman los diferentes lexemas de una
expresión en lugar de abreviarse se entrelazan.
Ese es el caso del majkmojkx
(15) en el que
se mezclan los fonemas
que forman la expresión majk (10)
mëkoxk (5).
En el apartado denominado similitudes y diferencias de los sistemas de numeración de las lenguas se explican cómo los sistemas de numeración varían en el tipo y cantidad de
irregularidades que presentan. Por lo pronto, vale la pena mencionar que, en general, los sistemas de numeración de las lenguas mesoamericanas tienen mucho menos
irregularidades que los de las lenguas europeas dominantes, incluyendo el del español.
3.2 Cosmovisión numérica
El sistema de numeración de una lengua
encarna aspectos de la cultura y
cosmovisión de la gente que lo ha desarrollado
a lo largo de su historia.
Algunos de esos aspectos son evidentes
para los
usuarios contemporáneos del sistema y otros
no, por lo que tienen que ser conjeturados. En el
caso del sistema numérico del ëyuujk (como el de muchas otras lenguas mesoamericanas),
su organización sugiere un fuerte
vínculo con el cuerpo
humano.
Como ya
se explicó, en el sistema de
numeración ëyuujk se utilizan como bases aditivas al 5 y 10 y como base
multiplicativa al 20 y el 100. Su
organización se asemeja a la de los
dedos en el cuerpo humano: cuatro extremidades con cinco
dedos cada una, veinte dedos en total. Eso hace que en ëyuujk las cantidades se expresen de manera
similar a si se especificara el número de cuerpos
completos, grupo de extremidades y
dedos individuales
que se necesitarían para
completar cierta cantidad de dedos. Por ejemplo, para completar 53 se necesitarían los dedos de dos cuerpos completos
(2 20),
un grupo de dos extremidades completas (10) y
tres
dedos más. En éyuujk, 73 se dice tëkipx
myiajk tëkëëjk que traducido literalmente quiere decir: tres-veinte y diez y tres. Los tres veinte
(tëkipxl) corresponderían a los tres cuerpos, el diez (mäjk) al grupo de dos extremidades y el tres (eyi) a tres dedos. Expresado
como configuración aritmética
queda así: (3 20)+10+3.
Otra base multiplicativa del sistema numérico del ëyuujk es el moony (400). Este número se constituye
de un solo lexema numérico. El moony se
usa sólo para cuantificar cuatrocientas mazorcas.
3.3 Clasificadores numéricos
La cosmovisión numérica de los hablantes de una lengua se hace notar
cuando en un sistema de numeración se utilizan clasificadores numéricos. Estos son manifestaciones lingüísticas
que especifican la naturaleza de los elementos que
están siendo cuantificados por un número. Generalmente aparecen como prefijos o sufijos, en los
números, pero también pueden ser
indicados usando un tono particular.
En el ëyuujk que se habla
hoy en día se usan clasificadores numéricos para cuantificar conjuntos y
objetos sueltos. Por ejemplo para una persona
que no tiene un pie
se le llama pajk tu‟uk
que significa literalmente en español (solo
tiene un hueso) o para cuantificar un conjunto de tortillas se le dice tu‟uk pájkx, un conjunto
de hojas de milpa para hacer tamales se le designa tu‟uk matxy.
Es importante aclarar que el lexema clasificador
indica la clase de las entidades
cuantificadas, más no la naturaleza
misma de estas entidades. Así, después del número, con clasificador incluido, era necesario especificar qué era lo que
se contaba
(ej. hojas).
El clasificador kijkx se usa para especificar que lo que
se cuenta tiene una forma alineada (ej., surcos,). Cuando el
tuujktujk (8) cuantifica un conjunto de surcos en una parcela,
se expresa como mytuujktujk kijkx
(ocho de lo alineado).
Los sistemas de numeración de varias de
las lenguas mesoamericanas que se
hablan en la actualidad utilizan
clasificadores numéricos. Entre ellas está el tsotsil. Es importante mencionar
que hay lenguas en otras partes del
mundo que también los usan (ej.,
el japonés).
3.4 Similitudes
y diferencias entre los sistemas de numeración de algunas lenguas mesoamericanas.
Este apartado está basado en el análisis realizado a los sistemas de
numeración de seis lenguas que se hablan en el territorio oaxaqueño 4,
la mayoría en una o dos variantes y una lengua indígena que se habla en el
estado de Chiapas (Tabla 14).
Tabla 14. Las lenguas cuyos
sistemas numéricos fueron analizados
Lengua
|
Variante
|
Chinanteco
|
variante baja
|
Mazateco
|
Mazatlán Villa Flores
|
Mixe
|
Variante alta y media de
Oaxaca
|
Mixteco
|
valle y costa de Oaxaca
|
Tsotsil
|
Variante de San Andrés
Larrainzar
|
Zapoteco
|
Variante sierra norte, sur
y del valle
|
Zoque
|
Variante San Miguel Chimalapa
|
El objetivo es
presentar una descripción de las similitudes y diferencias que puede llegar a
haber entre los sistemas de numeración de diferentes lenguas. Es importante

4
Los análisis fueron realizados,
casi todos, con la ayuda de profesores de Educación indígena del estado de Oaxaca. En el de la
lengua tsotsil ayudó un profesor del mismo nivel educativo y de
alumnos de una escuela
primaria bilingüe de una colonia
llamada Santo Domingo del municipio de Bochil estado de Chiapas
Sus nombres y referencias a los trabajos
que han realizado se encuentran
al final de este escrito.
mencionar que también puede haber diferencias en el caso del sistema de
numeración de una misma lengua, en como es utilizado por hablantes de
diferentes variantes.
3.6.1 Bases multiplicativas
De acuerdo a las bases multiplicativas que utilizan, los sistemas de numeración de las
lenguas que se analizaron se dividen en
dos grupos (Tabla 2). En el
primero se concentran los sistemas
que se asemejan al del tsotsil. En estos sistemas se utiliza al 20 y al 400 como bases
multiplicativas. En ellos, el 100 se
expresa como un múltiplo de veinte:
5 20; por ejemplo, en mixteco (variante bajo de Valles) 100 se dice u‟u diko. Traducida literalmente al español, esta expresión dice: cinco veinte; 5 20 (Tabla 15).
Tabla
15. Bases multiplicativas
|
Bases
multiplicativas
|
|
20 y 400
|
20 y 100
|
100
|
|
mazateco mixe mixteco zapoteco
|
Chinanteco
|
Tsotsil
|
|
Para expresar un número como 156, en
estos sistemas de numeración no se
comienza por indicar cuántas centenas completas lo forman, sino cuántas veintenas. Así, en mixteco 156 se dice iñu diko sa‟u in, que traducido literalmente al español significa siete veinte quince uno; (7 20)+15+1.
En el segundo grupo están las lenguas
cuyos sistemas de numeración utilizan como bases multiplicativas al 20 y al 100
(Tabla 15). Ello quiere decir que su organización se parece a la del mixteco,
pero sólo hasta llegar al número 99. El cien, en lugar de expresarse como un
múltiplo de veinte (5 20), tiene su propio nombre.
En algunas de estas lenguas se nota
que nombran al 100 haciendo un
préstamo del español. Por ejemplo, en mazateco 100 se dice jngu cientu (1
100).
En las lenguas que usan al 100
como base multiplicativa, los números del 101 al 999 se expresan utilizando al
cien como primera base y al veinte como segunda. Así, en zapoteco 156 se dice: tibigaywa tiopgal txyenu ditidy. Traducida literalmente al español, esta
expresión dice: uno cien
otro dos veinte
otro dieciséis; (1 100)+(2 20)+15+1.
No
sucede lo mismo con la numeración
chinanteca que su base multiplicativa
es 100 pero se le va agregando 20,10 y 40 (funcionan como bases aditivas). En 156
se dice: iñaló tolkiá iñén (1 100)+40+10+6
(Literalmente en español un cien,
cuarenta,
diez y seis (Tabla 16).
Tabla
16. Múltiplos de 100 al 900 de la numeración chinanteca
100
|
Iñaló
|
1(100)
|
200
|
Túnló
|
2(200)
|
300
|
Nénló
|
3(100)
|
400
|
Kiénló
|
4(100)
|
500
|
Iñanló
|
5(100)
|
600
|
Lñénló
|
6(100)
|
700
|
Kiúló
|
7(100)
|
800
|
„lñáló
|
8(100)
|
900
|
Néló
|
9(100)
|
3.6.2 Bases aditivas
En el sistema de numeración del
español, las bases aditivas son todas múltiplos de 10 (su base multiplicativa).
Así, los números del 1 al 9 se expresan con un solo lexema numérico (uno, dos,
tres, cuatro, cinco, seis, siete, ocho y nueve). El 10 se utiliza como base
aditiva para decir los números del 1 al 19 (ej., dieciséis; 10+6). El veinte (2x10)
se usa para decir los números del 21 al 29 (ej., veintiséis; [2 10]+6). El treinta
se usa para decir los números del 31 al 39 (ej., treinta y seis; [3 10]+6).
En el apartado denominado operaciones
aritméticas se describió cómo el sistema de numeración del ëyuujk funciona
diferente. En este sistema el e‟px (20) es la base multiplicativa. Si bien
sus múltiplos son bases aditivas (ej., ëxtijkx
tyiaxjk; dos-veinte y cuatro; ([2
20]+ 4), existen otras: el mëkoxjk (5), y el mäjk (10).
Todos los sistemas que se analizaron utilizan bases aditivas adicionales
a la base multiplicativa. Estas bases aditivas son siempre agrupaciones
formadas por iteraciones del cinco (5,
10, 15, 20 o 40). Como mostramos a continuación, los sistemas que se analizaron
se diferencian entre sí en términos de cuáles agrupaciones utilizan (Tabla 17).
Tabla 17.
Las seis lenguas agrupadas según las bases aditivas que utilizan,
adicionalmente a la base multiplicativa
multiplicativas
Bases
aditivas adicionales
|
||||
5, 10 y 15
|
10 y 15
|
5 y 10
|
10
|
10,20 y 40
|
Mazateco
|
Mixteco
|
mixe alta
|
Tsotsil
|
Chinannteco
|
Mixe media
|
Zapoteco
|
|
|
|
|
(variante sierra
|
|
|
|
|
norte y valle de
|
|
|
|
|
Oaxaca)
|
|
|
|
Bases aditivas 5, 10 y 15
El mixe medio y
el mazateco utilizan al 5, al 10 y al 15 como bases aditivas (Tabla 18).
|
Tabla 18. Los
|
números
|
mazatecos del
|
1 al 19
|
|
5 on
|
10
|
tie
|
10+5
|
tjion
|
|
1 jngu
|
1+5 jion
|
10+1
|
tejngu
|
(10+5)+1
|
tjion jngu
|
2 jo
|
7 yatu
|
10+2
|
tejo
|
(10+5)+2
|
tjion jo
|
3 jian
|
3+5 jin
|
10+3
|
tejían
|
(10+5)+3
|
tjion jian
|
4 ñujun
|
4+5 ñajan
|
10+4
|
teñujun
|
(10+5)+4
|
tjion ñujun
|
En la Tabla 18 puede notarse
cómo, en mazateco, para expresar
los números del 11 al 14 se
utiliza la cadena fonética te, la cual es una abreviación del lexema numérico tie (10). A esta cadena la acompañan, secuencialmente, los lexemas jngu (1), jo (2), jian (3), y
ñujun (4). Los números del 11 al
14 se expresan caminando el lexema tjion
(15) con esa misma secuencia.
En los números del 6 al 9
aparecen algunas irregularidades. Sin embargo,
se nota que una parte del lexema jngu (1) acompaña al lexema on (5) en la expresión
jion (1+5). El jin es
una abreviación
de la expresión
jian on (3+5). Algo similar sucede con ñajan:
ñujun on (4+5).
Los números del mixe de la variante media al igual que el mazateco
utilizan ba ses aditivas como el 5, 10 y 15 (Tabla 19)
![]() |
Tabla
19. Números mixes de la variante media
|
|
5
|
mäkoxk
|
10 mäjk
|
15 mämojkx
|
1
|
tu‟uk
|
1+5
|
Tätujk
|
10+1 mäjk tu‟uk
|
15+1 mämojkx tu‟uk
|
2
|
Mätsk
|
2+5
|
Wïxtujk
|
10+2 mäjk mätsk
|
15+2 mämojkx mätsk
|
3
|
Tëkëëk
|
3+5
|
tuuktujk
|
10+3 mäjk tëkëëk
|
15+3 mämojkx tëkëëk
|
4
|
mäktaxk
|
4+5
|
Täxtujk
|
10+4 mäjk majks
|
15+4 máktaxjkmämojkx
|
Entre los
sistemas analizados, existe un grupo en el que el 5 no se usa como base aditiva pero sí el 10 y el 15 (Tabla 17). En
este grupo está el sistema de numeración del mixteco (Tabla 20)
Tabla
20. Los números mixtecos del 1 al 19
|
10
|
uxi
|
15
|
sa‟un
|
1 ín
|
10+1
|
uxi ín
|
15+1
|
sa‟un in
|
2 ui
|
10+2
|
uxi ui
|
15+2
|
sa‟un ui
|
3 uni
|
10+3
|
uxi uni
|
15+3
|
sa‟un uni
|
4 kumi
5 u‟un
|
10+4
|
uxi kumi
|
15+4
|
sa‟un kumi
|
6 iñu
|
|
|||
7 usa
|
||||
8 una
|
||||
9 in
|
En la Tabla 20 puede notarse cómo, en mixteco, para expresar los números del 1 al 10 se utiliza un solo lexema numérico. En cambio, para
expresar los números del 11 al 14 se combina el
lexema uxi (10) con la secuencia:
ín (1), ui
(2),
uni (3),
y kumi (4). Los
números del 16 al 19 se expresan caminando el
lexema sa‟un (15), con
esa misma secuencia.
El mixe medio y el mazateco
también utilizan el 10 y el 15 como
bases aditivas (Tabla 17). Estos
sistemas se diferencian del mixteco en que para
expresar al número 15 se utiliza
la combinación 10 y 5.
La Tabla 21 muestra el caso del zapoteco:
Tabla
21. Los números del zapoteco del 1 al 19
10 dxi 10+5 txyenu
1 tiby 10+1 dxitiby 15
+1 txyenu ditidy
2 tiopa
|
10+2 dxitiopa
|
15+2
|
txyenu
|
ditiopa
|
3 dxona
|
10+3 dxidxona
|
15+3
|
txyenu
|
didxon
|
4 tapa
|
10+4 dxitap
|
15+4
|
txyenu
|
ditapa
|
5 gay
|
|
|||
6 xopa
|
||||
7 gadxa
|
||||
8 xuna
|
||||
9 gaa
|


En la Tabla 21 puede notarse cómo el sistema numérico del zapoteco se
asemeja al del mixteco en que para expresar los números del 1 al 10 se utiliza
un solo lexema numérico. También se asemeja en que en los números del 11 al 14
se utilizan dos lexemas. En ellos aparece el lexema numérico dxi (10)
acompañado de la secuencia dxi (1), tiopa(2), dxona (3).tapa (4)
Entre los sistemas analizados, existe un grupo más en el que el 15 no se usa como base aditiva pero sí el
5 y el 10 (Tabla 7). El sistema del ëyuujk (mixe alta) pertenece a este
grupo (Tabla 17).
Tabla
22. Los números ëyuujk (mixe alta) del 1 al 19
|
5
|
mëkoxk
|
10
|
majk
|
|
1 tu‟ uk
|
1+5
|
tëtujk
|
10+1
|
majk tu‟uk
|
|
2 mäjtsk
|
2+5
|
ëjxtujk
|
10+2
|
jkts
|
|
3 tëkëëk
|
3+5
|
tuuktujk
|
10+3
|
|
k
|
4 mëktaxk
|
4+5
|
taxtujk
|
10+4
|
majkmakts
|
|
|
10+5
|
majkmokx
|
|
||
10+ (1+5)
|
majktujt
|
|
|||
10+ (2+5)
|
majkëjxtujk
|
|
|||
10+ (3+5)
|
majktuuktujk
|
|
|||
10+ (4+5)
|
majktaxtujk
|
|
En la Tabla 22 puede notarse
cómo, en ëyuujk (mixe alta), para
expresar los números del 11 al 19 se usa
el lexema numérico majk (10). Lo acompañan los números del
tu‟ujk (1), al taxtujk (9). Menos evidente es el hecho de
que para expresar los números del 6 al 9 se utiliza la cadena fonética tujk, la cual sustituye
a mëkoxk
para expresar 5. A la
cadena tujk la preceden, expresados con algunas
variaciones y sustituciones, los lexemas
tu‟uk (1), mäjtsk (2), tëkëëk (3), y mëktaxk (4).
Base aditiva 10
Entre los sistemas numéricos analizados, también hay un grupo que utiliza solamente al 10 como base aditiva adicional (Tabla 17). El sistema numérico del tsotsil es uno de ellos (Tabla 23).
Además del chinanteco que utiliza como base aditiva adicional al diez,
también los números del tsotsil lo utilizan. En la tabla 21 se muestran los
números del ba‟tsi k‟op (tsotsil) l1 al 19.
Tabla 23.
Los números batsi´ k‟op (tsotsil) del uno al diecinueve 10 lajuneb
1 Jun
|
11
|
Buluchib
|
2 Chib
|
10+2
|
Lajchaeb
|
3 Oxib
|
3+10
|
Oxlajuneb
|
4 Chanib
|
4+10
|
Chanlajuneb
|
5 Jo‟ob
|
5+10
|
Jo‟lajuneb
|
6 Vakib
|
6+10
|
Vaklajuneb
|
7 Jukub
|
7+10
|
Juklajuneb
|
8 Vaxakib
|
8+10
|
Vaxaklajuneb
|
9 Baluneb
|
9+10
|
Balunlajuneb
|
Base aditiva 10, 20 y 40
La lengua que usa como base aditiva 10,20 y 40 es el chinanteco. Para nombrar 43 se dice: toló nén (Literalmente en español
cuarenta y tres), 40+3. O bien para
decir 76 se nombra tolkiá ts kíu Iñén
(literalmente en español setenta y
seis), 40+10 y 20+6. En esta expresión numérica se nota con
claridad las bases 10,20 y 40 y el lexema ts es
una conjunción.
Como se explica en el ejemplo
este caso no se presenta en las
otras numeraciones que fueron
analizadas. En la estructura interna de la numeración chinanteca del Kíu
(20) al Tolkiá ts Toló iñí (99) en su operación
aritmética se expresa 40+10+40+9 únicamente se dan operaciones aditivas. A partir del Iñaló (100) y
sus múltiplos hasta
el Iñíló 999 se ve la base multiplicativa (Tabla 16). El lexema
ló es la palabra numérica que
representa 100 y aparece como sufijo en los
lexemas numéricos del 100 al 999.
En la Tabla 23 puede notarse cómo todos los números del sistema numérico
chinanteco ahí escritos del uno al diez tienen su propio nombre. Kón (1), (Tún 2), Nén (3), Kién (4), Iñan (5), Iñén (6), Kiú (7), „Iñá (8), Iñí (9).
Tabla 24. Los números chinantecos del 1 al 19
10
Kía
1 Kón
|
10+1 Kía kón
|
2 Tún
|
10+2 Kía tún
|
3 Nén
|
10+3 Kía nén
|
4 Kién
|
10+4 Kía kién
|
5 Iñan
|
10+5 kía iñan
|
6 Iñén
|
10+6 Kía iñén
|
7 Kiú
|
10+7 Kía kiú
|
8 „Iñá
|
10+8 Kía „Iñá
|
9 Iñí
|
10+9 Kía né
|
En la Tabla 24 también puede
notarse cómo para expresar los números
del 11 al 19 se usa la secuencia del. Kón (1), (Tún 2), Nén (3), Kién
(4), Iñan (5), Iñén (6),
Kiú (7), „Iñá (8), Iñí
(9). A esta secuencia le antecede la palabra Kía (10).
La tabla 25 muestra los números del 20 al 29. Donde la expresión Kíu (20)
funciona como base aditiva. Para construir los números del 21 al 29 se le
agregan los lexemas numéricos Kón (1), (Tún 2), Nén (3), Kién (4), Iñan (5),
Iñén (6), Kiú (7), „ Iñá (8), Iñí
(9)
Tabla
25. Los números chinantecos del 20 al 29
20
|
Kíu
|
20+1
|
Kíu kón
|
20+2
|
Kíu tún
|
20+3
|
Kíu nén
|
20+4
|
Kíu kién
|
20+5
|
Kíu iñan
|
20+6
|
Kíu iñén
|
20+7
|
Kíu kiú
|
20+8
|
Kíu „Iñá
|
20+9
|
Kíu iñí
|
En la tabla
26 se muestran los números del Kíukiá (30) al Kíukiá iñí (39). En el cuadro
se nota la base 10 y 20. Se le agregan los números del kón (1) al iñí (9).
Tabla
26. Los números chinantecos del 30 al 39
30
|
Kíukiá
|
20+10
|
31
|
Kíukiá kón
|
20+10+1
|
32
|
Kíukiá tún
|
20+10+2
|
33
|
Kíukiá nén
|
20+10+3
|
34
|
Kíukiá kién
|
20+10+4
|
35
|
Kíukiá iñan
|
20+10+5
|
36
|
Kíukiá iñén
|
20+10+6+
|
37
|
Kíukiá kiú
|
20+10+7
|
38
|
Kíukiá „Iñá
|
20+10+8
|
39
|
Kíukiá iñí
|
20+10+9
|
En la tabla 27 los números
chinantecos del Toló (40) al toló iñí (49). A partir de toló
(40) lexema numérico se le adicionan
los números del kón (1) al iñí (9).
Tabla
27. Los números chinantecos del 40 al 49
40
|
Toló
|
40
|
41
|
toló kón
|
40+1
|
42
|
toló tún
|
40+2
|
43
|
toló nén
|
40+3
|
44
|
toló kién
|
40+4
|
45
|
toló iñan
|
40+5
|
46
|
toló iñén
|
40+6
|
47
|
toló kiú
|
40+7
|
48
|
toló „Iñá
|
40+8
|
49
|
toló iñí
|
40+9
|
Los números del tolkiá
(50) al tolkiá Iñí (59) se ven en
la tabla 28. Para nombrar tolkiá
(50) se construye del prefijo tol de la expresión toló (40) y se le agrega
kiá (10). En su representación
aritmética se expresa 40+10. Del 51 al 59 se le
agregan los números del 1 al 9 (Tabla 24).
Tabla 28. Los números chinantecos del 50 al 59
50
|
tolkiá
|
40+10
|
51
|
tolkiá kón
|
40+10+1
|
52
|
tolkiá Tún
|
40+10+2
|
53
|
tolkiá Nén
|
40+10+3
|
54
|
tolkiá Kién
|
40+10+4
|
55
|
tolkiá Iñan
|
40+10+5
|
56
|
tolkiá Iñén
|
40+10+6
|
57
|
tolkiá Kiú
|
40+10+7
|
58
|
tolkiá „Iñá
|
40+10+8
|
59
|
tolkiá Iñí
|
40+10+9
|
En los números del Tolkiá ts
Kíukiá (80) en su expresión
aritmética se expresa 40+10+20+10 al Tolkiá ts Kíukiá ts
iñí (89) en su representación
aritmética 40+10+20+10+9 se aprecia con claridad el uso de las bases
aditivas 10, 20 y 40 (Tabla 29) se le agregan los números del 1 al 9
(Tabla 24).
Tabla
29. Los números chinantecos del 80 al 89
80
|
tolkiá ts Kíukiá
|
40+10+20+10
|
81
|
tolkiá ts Kíukiá ts Kón
|
40+10+20+10+1
|
82
|
tolkiá ts Kíukiá ts Tún
|
40+10+20+10+2
|
83
|
tolkiá ts Kíukiá ts Nén
|
40+10+20+10+3
|
84
|
tolkiá ts Kíukiá
ts Kién
|
40+10+20+10+4
|
85
|
tolkiá ts Kíukiá
ts Iñan
|
40+10+20+10+5
|
86
|
tolkiá ts Kíukiá
ts Iñén
|
40+10+20+10+6
|
87
|
tolkiá ts
Kíukiá ts Kiú
|
40+10+20+10+7
|
88
|
tolkiá ts Kíukiá ts „Iñá
|
40+10+20+10+8
|
89
|
tolkiá ts Kíukiá ts iñí
|
40+10+20+10+9
|
3.6.3 Clasificadores numéricos
De los sistemas de numeración analizados (Tabla 17), dos utiliza
clasificador numérico. El clasificador es un recurso utilizado en algunas
lenguas para especificar la clase de las entidades que son contadas o
cuantificadas. La forma en la que se manifiesta un clasificador en los sistemas
analizados es diferente.
El tsotsil tiene clasificadores precisos. Dependiendo de la variante,
existen clasificadores para indicar el tipo de ser vivo que se cuenta (persona,
animal o vegetal). También para indicar la forma del objeto contado (ej.,
circular, redondo, o alargado, con patas). En tsotsil, el clasificador aparece
como un sufijo (Tabla 23).
3.6.4 Irregularidades
Todos los sistemas de numeración que analizamos tienen algunas
irregularidades. Las más comunes implican que existan dos o más cadenas
fonéticas para expresar un mismo número. Por ejemplo, en el apartado 3.3 se
explico cómo en ëyuujk tanto mëkoxk como
tujk y mojkx (Tabla 22) se utilizan
para expresar 5. En chinanteco, Iñí ,
y né expresan 9 (Tabla 24)
Otro tipo de irregularidad implica que haya alteraciones en algún patrón
cuantitativo. Por ejemplo, en mazateco, mixe, lo común es que cuando dos
números se combinan aditivamente, se expresa primero el mayor y luego en menor.
Sin embargo, en los números del 6 al 9 sucede lo contrario, primero se dice el
menor y luego el mayor (Tablas 17 y 22); por ejemplo, en ëyuujk 9 se dice täxtujk que traducido literalmente significa cuatro-cinco (4+5). De igual forma sucede con los números del
tsotsil en los números, (Tabla 23), por ejemplo: oxilajuneb (3+10), Jo‟lajuneb
(5+10), Vaklajuneb (6+10), Juklajuneb, (7+10) Vaxaklajuneb (8+10). También hay
casos como el del número Iñí (9) del
chinanteco, el único entre el 1 y el 10 que tiene su propio nombre (Tabla 24).
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