Claudia Celis, “Mi tía Chabela” en Donde habitan los ángeles. México, SEP-SM, 2002.
15. Mi tía Chabela
Mi tía Chabela es una sonrisa, unas manos suavecitas; un mi niño, mi
amor, mijito; un abrir los ojos durante las noches que estaba enfermo y
encontrarla sentada en la orilla de mi cama; un pásate con nosotros, cuando yo
no podía dormir. Una sopa riquísima, una cucharada de emulsión que me tenía que
tomar, para que crezcas mi cielo. Mi tío siempre agregaba: para que no te
quedes chaparro como tu tío Rubén; unos tamales para desayunar, un pastel
recién hecho para merendar, y un baño en la tina antes de empiyamarme. También
es un perfume, un chal tejido cuando atardecía, un cabello plateado, una
canción tarareada mientras regaba sus plantas, y otra cantada a dúo con su
perico. Era una piel blanquísima y unos ojos azules que tan pronto eran lilas
como verdes.
A mí siempre me intrigaba ese cambio de color.
-Tía, ¿por qué tiene los ojos de tantos colores? -Porque son color del
tiempo, mi amor.
-¿Son azules cuando hay cielo azul?
-Sí, mi cielo.
-¿Y verdes cuando está nublado?
-Algo así, mi amor.
-¡Y lilas cuando florece la jacaranda?
-Sí, niño -se adelantó mi tío Tacho a contestar-, son como los de
usted: café común cuando hace frío, café corriente cuando llueve y café común y
corriente cuando hace calor.
Miré sus ojos.
-Como los suyos, ¿verdad, tío?
Mi tía sonrió burlona y él me dijo muy serio:
-Mire Panchito, ya estuvo bueno de estar analizando ojos, váyase a
hacer la tarea.
Y se puso sus lentes
oscuros.
Claudia Celis, “Mi tía Chabela” en Donde habitan los ángeles. México,
SEP-SM, 2002.
ES GENIAL
ResponderEliminarES UNA PASADA
ResponderEliminarVALE GRADDSIAS
ResponderEliminarME HA SERVIDO
ResponderEliminarNo me parecen que no estén todas las páginas
ResponderEliminar